Por Martha López Huan
El Instituto Nacional de Antropología e Historia, en coordinación con la Arquidiócesis de Yucatán, rescata una campana de 60 kilos que pertenecía a la antigua Capilla de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, ubicada en la Plaza principal de Pisté, Yucatán, informó José Arturo Chab Cárdenas, director del Departamento Jurídico del INAH en la entidad.
Además, el INAH y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) siguen trabajando en el Programa de Obras de Mejoramiento Urbano para dar esplendor al centro de esa localidad que anualmente recibe a miles de turistas que visitan Chichén Itzá.
Incluso, trascendió que ante el esplendor arqueológico podrían construir un Museo de sitio para deleite de visitantes nacionales, extranjeros y habitantes de Pisté.
La campana de bronce fue bajada por personal del INAH de la nueva capilla de la localidad de Pisté, construida en los años 80s del siglo pasado, y trasladada a una de las torres de la antigua capilla, cuyos antecedentes constructivos datan del siglo XVIII.
El objetivo es que el conjunto histórico recupere sus características formales y espaciales, usando las técnicas constructivas originales y habilitando el espacio para su función cultural.
La restauradora Claudia García Solís, adscrita a la Sección de Conservación y Restauración del Centro INAH Yucatán, supervisa los trabajos para la limpieza de algunos elementos arqueológicos e históricos que presentan diversas inscripciones y que aparecieron en los muros del conjunto histórico.
José Arturo Chab Cárdenas comentó que se hallaron algunas piedras labradas prehispánicas que formaron parte de edificios pertenecientes al grupo arquitectónico de Pisté, asociado a la Zona Arqueológica de Chichén Itzá.
Ante la importancia histórica del conjunto religioso se prevé construir un Museo de Sitio a cargo del INAH para que la comunidad fortalezca su identidad colectiva y tenga un nuevo atractivo cultural y turístico.
Hace unos días informamos que Pisté pronto recuperaría su esplendor debido a los trabajos que el INAH realiza en los vestigios arqueológicos de un cuartel militar y la Capilla de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción.
Los restos del cuartel o destacamento militar, descubiertos en julio de 2021, indican que fueron usadas durante la Guerra de Castas, registrada de 1847 a 1901.
Sobre la Capilla de la Inmaculada Concepción, el INAH informó que innumerables crónicas la mencionan, «desde los primeros exploradores de Chichén Itzá, que encontraron refugio en aquellos muros de cantera de piedra, donde yacían algunas rocas labradas que pertenecieron a basamentos prehispánicos de Pisté».
Los primeros exploradores extranjeros que visitaron Chichén Itzá, como el francés Claude Désiré Charnay y los británicos Augustus Le Plongeon y Alfred Maudslay, registraron en sus anotaciones el edificio religioso y el entorno de la localidad.
A partir de los trabajos de consolidación y restauración, se puede observar la capilla con el aspecto que tuvo durante su bendición el 12 de marzo de 1908, a cargo del entonces arzobispo de Yucatán, Martín Tritschler y Córdova.
