Ya se investiga el Sacbé de Cacalchén, una caverna, material óseo, cuchillos de pedernal, cistas, tiestos, puntas de lanza, metates y piezas cerámicas completas
Por Martha López Huan
El Fondo Nacional para el Fomento al Turismo y el Instituto Nacional de Antropología e Historia anuncian nuevos descubrimientos de piezas y monumentos mayas, así como una caverna y un Sacbé en Cacalchén de 33 kilómetros.
En total, se reportan 16,572 piezas y monumentos encontrados en los primeros cuatro tramos del tren.
Ante la riqueza del patrimonio histórico y arqueológico, el Tren Maya toma medidas para estudiar el terreno por el que atraviesa la construcción para proteger la herencia cultural con el apoyo de arqueólogos y especialistas.
De acuerdo con Fonatur, el Tren Maya es una oportunidad única de investigación para vestigios que de otra forma hubieran permanecido en el olvido y expuestos al saqueo.
Uno de los más deslumbrantes es el Sacbé de Cacalchén , una vía pavimentada de 33 km, el segundo más grande del que se tiene conocimiento.
Cerca del área de Cacalchén también se descubrió una caverna con cuerpos de agua, el lugar posiblemente se utilizó por los antiguos mayas, por lo que el lugar se estudiará por medio del registro geoespacial para crear modelos 3D, que servirán para conocerla de manera virtual.
En esos lugares también se encontró material óseo, cuchillos de pedernal, cistas, tiestos, puntas de lanza, metates y piezas cerámicas completas.
Las piezas se trasladan a los laboratorios en bioarqueología, arqueometría y restauración de materiales arqueológicos.
A partir de los análisis se obtiene la cronología y el uso que le dieron los antiguos habitantes de Yucatán.
Por otra parte, Fonatur informó que a lo largo de los primeros cuatro tramos del Tren Maya ya se ejecutaron 302 kilómetros de terracería y se generaron 87,575 empleos.
